Le comenté a Antonia Romero que sabía hacer este postre y voy a volver a intentarlo. Es un postre típico tradicional de Austria y el sur de Alemania. Nada complicado, pero merece su tiempo para que salga muy rico. Es un postre para tomarlo caliente, aunque el relleno se puede hacer con antelación. Se acompaña normalmente con una bola de helado (a mí me gusta de vainilla)...aunque hoy prescindiré del helado y lo tomaremos caliente para rematar un potaje de garbanzos, judías y calabaza que luego pondré en el blo. Que disfrutéis ambos platos.
INGREDIENTES:
* 2 Manzanas reinetas. Son las más adecuadas, aunque yo lo he hecho con golden y sale también rico.
* 6 Láminas de pasta filo.
* 2 Cucharadas de azucar glasé.
* 200 Gr. de mantequilla (sin sal, porfa)
* 100 Gr. de nueces.
* 100 Gr. de pasas.
* Canela en polvo.
* Canela en rama.
1.- Poner una parte de la mantequilla en una sartén.
2.- Antes hemos de pelar y trocear las manzanas. Trozos no muy pequeños.
3.- Ponemos en la sartén la manzana, las pasas, las nueces y un par de ramas de canela. Sin romper, ya que luego hay que quitarlas.
4.- Saltear ligeramente y añadir el azucar para que vaya caramelizando la mezcla. Dejar unos 10 minutos a fuego suave.
6.- Calentar el resto de la mantequilla en el microondas para que se licue.
7.- Hay que ir haciendo rollos. En una superficie plana (yo he utilizado la placa del horno) poner papel aluminio. Con una brocha mojarlo un poco con mantequilla. Ir poniendo capas de pasta filo, mojar con más mantequilla. Así hasta 5 o 6 capas.
8.- Cuando ya estén, poner un par de cucharadas de la manzana y enrollar con cuidado.
9.- Ya los tenemos. Poner en una fuente de horno y tenerlos a 180º durante 30-40 minutos. Hasta que estén bien dorados.
11.- Ya están. A mí me gusta cubrirlos con azúcar Glase, un poco de canela molida y un chorrito de vainilla para sustituir el sabor del helado que no le acompaña. ¡A disfrutar!
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